Belfast es la capital de Irlanda del Norte y es tristemente famosa por los conflictos que enfrentaron a católicos y a protestantes y que todavía continúan latentes. Es común al llegar a la ciudad que guías, taxistas e incluso personas que puedas conocer allí se ofrezcan a mostrarte los restos de los muros que separaban los barrios de unos y de otros o los lugares dónde hubo los peores estallidos violentos.
Y es que esta ciudad, en el Ulster, tiene un pasado reciente lleno de luto y violencia como pocas, ya que además de los problemas relacionados con los movimientos a favor de la independencia del Reino Unido también sufrió durísimos bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial.